PRIMEROS
EJERCICIOS
Sección de
Estudio
Andrés J. Vigas
en Verda Stelo (monata gazeto).
Redaktejo kaj administrejo: avenida Sur, nº 13. Caracas, Venezuela
Nº 2, Augusto
1912. Redaktoro: Andrés J. Vigas. Administranto: J. R. Vigas. Paĝo
15-16.
Cautivado
por los progresos que ha hecho en todas las naciones la lengua
auxiliar Esperanto, concebí una vez el propósito de extender su
propaganda entre nosotros, seguro de que la notoria cultura
intelectual de los venezolanos había de prohijar mi intento con el
calor que naturalmente infunde uno de los adelantos más
trascendentales de la civilización actual.
Al
efecto, me propuse publicar un curso preliminar de esperanto que
comprendiese los elementos suficientes paa revelar la belleza,
sencillez y utilidad de la lengua y despertar el deseo de conocerla
ampliamente; é hice imprimir entonces el primer cuaderno: “Manual
P´ractico”, que aunque no es sino una cartilla de propaganda, no
ha defraudado mis esperanzas, pues ha contribuido á formar el
numeroso grupo de esperantistas venezolanos.
Al
“Manual” debían seguir inmediatamente los ejercicios de
aplicación de las reglas gramaticales; y aquí tropecé con la
dificultad de que las imprentas locales carecían de los caracteres
tipográficos necesarios para la escritura esperanta. Esta dificultad
se había salvado en el “Manual” supliendo á la mano, en cada
ejemplar, la deficiencia de los tipos; pero era insuperable al
tratarse de los Ejercicios, donde es considerable el número de
letras que llevan el acento esperanto. Así, pues, me ví obligado á
suspender hasta mejor oportunidad la publicación de los cuadernos.
Sirva esta explicación para satisfacer á los muchos esperantistas
que me han manifestado sus naturales impaciencias sobre el
particular.
Hoy,
que después de constante diligencia poseo ya los caracteres
tipográficos que faltaban, aprovecho las columnas de Verda Stelo
para publicar los “Primeros Ejercicios”.
En
ellos he seguido el orden y adoptado los ejemplos clásicos del
Ekzercaro del doctor
Zamenhof; bien que no me he limitado á proporcionar al principiante
la práctica metódica de las reglas del “Manual”,. Sino que he
creído conveniente ofrecerle un vocabulario lo más abundante
posible; hacerle conocer algunas locuciones especiales de la lengua y
revelarle de una vez la importante función de los afijos.
Para
obtener de estos ejercicios el mayor provecho, recomiendo al
estudiante que los traduzca cuidadosamente pro escrito, sin
hacer uso de la clave, la cual
no debe consultar sino para corregir la traducción luego
que creyere haberla hecho á cabalidad.
En seguida conviene hacer la traducción oralmente.
El vocabulario es indispensable aprenderlo muy bien de memoria. Para
evidenciar esta necesidad he cuidado de no dar sino una sóla vez el
significado de cada palabra.
Practíquese sin precipitación, aunque se invierta mayor tiempo,
para afimar bien el fruto del estudio y para no contraer resabios que
más tarde difícil corregir.